"Comenzar a escribir, así, sin más... sin pensar en las consecuencias, sin detenerme a reflexionar, poner mi vida entera en el papel impreso, mis sueños y sangre plasmados. En fin, basar mi existencia con sus reticencias y dudas, con sus alegrías, lágrimas de dolor y vergüenza, con todo lo que deseo y no tengo, basarlo todo, como he dicho, en una historia parpadeando sospechosa desde un estante..."

-Salvastar.

viernes, 24 de diciembre de 2010

Llegó la Navidad!!!

Y bueno, ustedes saben que mis mejores deseos (que son muchos) son para todos los que me rodean, incluyéndolos a ustedes, por supuesto, y como prometí algo navideño y no se me prendió el foco sino para escribir sólo éste villancico, pues lo pongo arriesgándome a ser tachada de ñoña... Aquí va, espero no se duerman mientras lo leen.

Haku pide posada.

Haku: En nombre del Cielo,
         déjame entrar,
         pues hace mucho frío,
         me puedo congelar.
Laura: Me da hueva abrir,
         no maúlles más,
         pues de una vez te digo
         aquí no dormirás.
Haku:No seas tan malosa,
         al menos déjame maullar,
         quiero estar adentro
         y poderme calentar.
Laura:Tienes muchas pulgas,
         me las puedes pasar,
         y toda la santa noche
         rascándome la podría pasar.
Haku:Eso es por tu culpa,
         ¿qué no me puedes bañar?
         ahora con mis bichos
         tú tendrás que cargar.
Laura:Me está dando sueño,
         ¿porqué me haces remilgar?
         ésta tonadita
         ya no quiero cantar.
Haku:Si tú eres terca,
         yo lo soy aún más,
         como tu mascota
         me debes cuidar.
Laura:Sólo por ésta vez
         te dejaré entrar,
         pa' que duermas conmigo
         mientras llega Navidad.
 
Entra Haku, ¿qué más queda?
                   ¿qué más queda?
amigas somos al fin,
calientitas dormiremos
                dormiremos,
esperando divertir.

Las dos:Celebremos las dos juntas,
                                las dos juntas
que llegó la Navidad,
y el año que ya llega
             que ya llega
juntas nos encontrará.

A todos nuestros amigos,
             nuestros amigos,
les deseamos lo mejor,
que estén todos divertidos
                         divertidos
y haya paz en su corazón.

Bien, sólo una aclaración, Haku es mi gatica y es la que está al final del blog, ¡Felices fiestas a todos!

lunes, 20 de diciembre de 2010

Tratamiento a la seca, ñec!!!

Bien, ahora un poco por lo que hay que pasar, otro poco por amor al arte (¿cuál?) y otro poquitín por que el blog como que apesta, pero ahora tengo éste relatito que es una real pequeñez, pero explica un poco el nombre del blog, y éso basta, espero poder traerles alguna pastorela para Navidad, o algo así, bueno, espero que estén genial, y que se la pasen de lo mejor...


Tratamiento a la seca.
Yo sólo quería un “No te preocupes, ya se te ocurrirá algo más adelante” o más simple “Ánimo, échale ganas” ¿Cuánto les costaba decírmelo? ¿Qué perdían con hacerlo?...
-Tú sólo te entiendes con “ésos” que tienen ideas desviadas y fuera de lógica, nosotros somos personas normales.- Las palabras de mi madre eran ásperas.
La soledad ¡Cómo pesa la soledad! La ausencia de cariño… las horas vacías. “No puedes hacer nada…” Dijo mi padre un día “el perro es más útil que tú…” Remató cuando le comenté que quería escribir más seriamente. “De eso no se vive ¡Ya hazte independiente, por amor de Dios!” Fue lo que dijo mi mamá al enterarse.
No pueden guardar discreción, ni yo puedo, pensé cuando una señora se enteró y comenzó a reírse “¡Ay, hija…! Eso déjalo para las personas importantes, nosotros no estamos hechos pa’ eso.” Usted no está hecha sino para parir, pensé, que sólo eso ha hecho. “¿Con eso te emocionas?” Los comentarios negativos llovieron y yo pensé que podía aprovecharlo, que yo, al igual que Eli, podía convertirlo todo en combustible.
Mis “tarugadas”, mis “burradas”, mis “ñoñerías” como comenzaron a llamar a mis manuscritos hicieron crecer el grueso de hojas, tanta esperanza vertida en el papel, y un montón de regaños recibidos. Llegó un día en que todo eso hizo mella y pensé en las hojas blancas como mi única salida, ya no lo veía como lo que quería hacer, se trataba de mi válvula de escape, y cuando pensé que acabaría fue justamente lo contrario, al final del túnel de soledad y tristeza escritas pude ver una luz pequeña. Acostumbrada a escribir cosas tristes no pude plasmar todo lo que ahora veía y sentía. La “seca literaria”, ése fue mi mal. Con un síndrome de abstinencia de palabras, me dediqué a vagar por la casa con mi cuaderno y lápiz, y la esperanza de algún apoyo o idea. Se me hacía desesperante pensar que no había escrito nunca, sino que sólo me había estado desahogando. Se me hacía triste no poder escribir ahora.
Yo sólo quería conversar con alguien al fin y al cabo, comentar un libro, hablar de chismes, si no había de otra, el caso era desaparecer la seca hablando con alguien, y que de paso me comprendieran un poco…
Las palabras de mi madre me volvieron a la realidad.
-¡A ti nadie te entiende!